Hoy no voy a la oficina

Hoy no voy a la oficina

Revisando los periódicos me encontré que el 21 de Junio es el Día del Trabajo en Casa, y no se trata de celebrar las labores del hogar -que no son desdeñables-, en realidad la fecha hace mención a una tendencia laboral que está adquiriendo una presencia importante, me refiero al home working, trabajo a distancia o teletrabajo.

Se trata realizar el trabajo de la oficina desde un punto remoto, principalmente la propia casa, aprovechando las facilidades que nos ofrecen las nuevas tecnologías de la información y telecomunicaciones. En muchos de los casos, solo basta una computadora, una línea telefónica y conexión a internet.
El teletrabajo ofrece un incremento en la calidad de vida de los empleados, al permitirles mayor tiempo en casa con su familia, y evitar los desplazamientos innecesarios en ciudades de tráfico conflictivo, con los ahorros que esto conlleva.
Esta modalidad de trabajo ha sido implementada por grandes corporativos, entre los que destaca IBM, quien inició esta estrategia en 1995, logrando una reducción del espacio de oficinas de aproximadamente 7,250,000 metros cuadrados. En Estados Unidos, el ahorro anual logrado suma cien millones de dólares y, por lo menos, la misma cantidad en Europa. De acuerdo al estudio Working Ouside the Box, realizado por Janet Caldow, IBM cuenta con 386,000 empleados, de los cuales el 40 por ciento trabaja a distancia.

La revista Entrepreneur señala algunas ventajas del trabajo a distancia:

  • Conseguirás mayor productividad debido a la implantación del trabajo por objetivos.
  • Necesitarás menos infraestructura, por lo que tus costos bajarán.
  • Eliminas la ausencia laboral.
  • Implementarás nuevas tecnologías de información, mejorando su apariencia para el consumidor.
  • Habrá un mejor aprovechamiento de los puestos de trabajo, ya que éstos pueden ser compartidos entre distintos trabajadores.

Por otra parte, la misma revista, afirma que el teletrabajo presenta algunas desventajas que deben tomarse en cuenta si se desea implementar esta dinámica en su empresa:

  • Existe un punto de rendimiento decreciente al emplear teletrabajadores, ya que el costo de un control de calidad es mayor que el valor que el que los trabajadores aportan, ya que la supervisión del trabajador en casa es menor.
  • Suele haber una pérdida de las jerarquías al no existir una supervisión continua.
  • Se crea una menor identificación del trabajador con la empresa.
  • Este aislamiento físico produce una menor socialización y participación por parte del trabajador para con la empresa.
  • Se pueden crear conflictos con la lealtad del empleado, por la misma razón de no sentir una gran identificación con ésta.

Para implementar este tipo de trabajo, es fundamental analizar la cultura de cada empresa. Cuanto más sólida sea, menos necesarias serán la formación y la supervisión explícitas. Desde mi experiencia personal, puedo afirmar que el teletrabajo me resulta cómodo y funcional cuando requiero realizar labores de investigación, documentos o si debo ejecutar tareas que demandan mi completa concentración, para lo cual he acondicionado un espacio de trabajo, y siempre tomando en cuenta que el trabajo en casa sigue siendo trabajo.
Por otra parte, siempre considero necesario acudir a las instalaciones de la empresa si debo interactuar con los recursos que las instalaciones de la oficina me ofrecen o si se trata de reuniones de carácter estratégico.

Si trabajas desde casa obtén tu checklist para trabajo remoto.


Por: Andrés Mayo 

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