Hace poco más de un año acepté hacer los procesos y políticas para una empresa que estaba creciendo muy rápido y no tenía nada escrito, al mismo tiempo que llevaba Octhopus y veía qué hacía por las tardes con dos niños muy energizados. En pocas palabras me estaba volviendo loca. ¡Fue cuando me di cuenta de que a pesar de creer firmemente en delegar no lo estaba haciendo!
Delegar nunca ha sido fácil. Creo que todos debemos darnos un tiempo de vez en cuando y pensar qué cosas no deberíamos estar haciendo nosotros.
Te comparto 5 tips para ayudarte a delegar:
- Define qué actividades no deberías realizar tú. La regla 20/80 dice que el 20% de tu esfuerzo genera el 80% de tus resultados. Entiende cuál es ese 20% y enfócate en esas tareas, las demás tareas piensa seriamente en delegarlas.
- Conoce las habilidades de tus colaboradores. Todos tenemos habilidades diferentes y en algunas cosas somos mejor que otros. Observa a tu equipo y delégales actividades en las que creas que pueden ser buenos y te ayuden a crecer y ser mejor, aunque también considerando en qué áreas deben desarrollarse. Si son actividades que nunca han hecho dales la oportunidad, pueden llegar a ser muy buenos. ¡Confía en tu equipo!
- Comunica y retroalimenta constantemente. Indica de forma clara qué resultados esperas, el tiempo esperado para acabar esa tarea, cosas que te gusten y no te gusten. Tu objetivo no sólo debe ser que hagan lo que tu hacías sino que también te den recomendaciones y sugerencias. Recuérdales la importancia de ser proactivos.
- No te desesperes. La primera vez que delegas una tarea puede tomar el doble de tiempo realizarla, mientras la otra persona entiende cómo hacerla. Pero sin duda vale la pena, porque poco a poco podrás enfocarte en otras actividades. Recuerda que las empresas con directores que saben delegar obtienen hasta un 33% más de ingresos y generan más empleos. (Delegating: A Huge Management Challenge for Entrepreneurs, Sangeeta Bharadwaj Badal and Bryant Ott, 2015).
- Da reconocimientos. Reconoce siempre a tu equipo y dales crédito cuando aplique. Eso los hará sentir bien y dar más de sí mismos.
Si te cuesta trabajo delegar, empieza con una tarea y cuando te sientas cómod@ delega otra tarea más y otra y otra… Y aunque sea difícil delegar recuerda que sabiéndolo hacer tiene más ventajas que desventajas.
¿Qué terminé haciendo yo?
Primero confié en la asistente virtual que tengo y la capacité para hacer diagramas de flujo a pesar de que nunca había hecho uno en su vida. Yo le mandaba fotos de los diagramas que hacía en papel y ella los pasaba en limpio en un programa específico. Esto me ahorró varias horas de trabajo. También aprendí a decir NO, así que ya no hago procesos de otras empresas =) y constantemente evalúo lo que hago, tareas que no debería estar haciendo definitivamente las delego.
Te invito a delegar más. ¡Una asistente virtual siempre te puede ayudar a hacer y lograr más!
Por: Gaby Manzur